Cientos de taxis se movilizaron por los principales accesos y el microcentro. Reclamaron contra las Apps por supuestas "ventajas impositivas y de control".
Según indicaron los organizadores, taxistas autoconvocados, la protesta se realizó a través de una caravana que, si bien no implica un corte total, sí provocó "demoras significativas" en la circulación matinal, especialmente en las zonas de mayor flujo vehicular.
El núcleo de la queja de los taxistas tradicionales es la disparidad en las reglas de juego. Aseguran que las plataformas digitales operan con ventajas impositivas y de control que impactan directamente en su trabajo.
"Competimos en desigualdad de condiciones, ellos no cumplen los mismos requisitos ni tienen los mismos costos", expresaron algunos de los manifestantes, haciendo hincapié en la falta de equiparación de exigencias y cargas económicas.
Contrariamente con lo señalado, desde Maxim refirieron que no carecen de regulación. "La regulación existe y, de hecho, ha permitido que las plataformas de transporte se desarrollen, mejorando la movilidad urbana y contribuyendo a la reducción del desempleo en la ciudad", indicaron.
Asimismo, agregaron: "El tema de fondo es otro: ni los legisladores ni el propio mercado han comprendido aún que las plataformas digitales pueden ser una herramienta para que los servicios de taxi tradicionales se adapten al progreso y aumenten sus ingresos. Se trata de colaboración, no de competencia".
Ante la movilización, la Policía de Mendoza y los Preventores de Capital dispuso un amplio operativo de tránsito y seguridad. El objetivo fue acompañar el recorrido de la caravana, ordenar el flujo vehicular y evitar cualquier tipo de incidente que pueda complicar aún más la circulación en la ciudad.