El entendimiento fue rubricado este martes en Buenos Aires y establece la preservación total de los puestos de trabajo en las áreas que serán transferidas a nuevas operadoras, así como la plena vigencia de los servicios actuales y el pago del 100% de los salarios durante la etapa de transición.

El acuerdo establece un "stand by laboral", que prohíbe despidos o interrupciones salariales mientras se efectiviza el traspaso de las operaciones, ofreciendo así previsibilidad y tranquilidad a cientos de familias vinculadas al sector.

Desde el sindicato remarcaron con contundencia la ausencia del gobierno provincial en este proceso clave para el futuro energético y económico de Mendoza. "No han tenido ni tienen participación alguna en la defensa de los trabajadores. Su desinterés histórico por el sector ha sido evidente", subrayaron en un comunicado.

A contramano de la indiferencia oficial, el SPJC destacó que este logro es fruto del compromiso, el conocimiento profundo de la industria y la acción directa del gremio, sin necesidad de operadores políticos ni gestiones intermediarias. "Defendimos el empleo, los derechos y la dignidad con hechos concretos", concluyeron, reafirmando su compromiso de estar presentes en cada paso de esta transición estratégica para la provincia.