Mendoza será pionera en la aplicación de un programa que combina financiamiento y asistencia técnica para optimizar el riego y fortalecer a productores y pymes
En esta primera etapa, Mendoza será pionera en el país en su implementación, con la participación activa del Departamento General de Irrigación y el acompañamiento del INTA, que brindará asesoramiento técnico en territorio a productores y pymes.
También fueron parte de la presentación la vicegobernadora Hebe Casado; Marité Badui, subsecretaria de Infraestructura y representante de la provincia ante el CFI; los intendentes de Junín, Mario Abed, y de San Martín, Raúl Rufeil; y la directora de Programas del CFI, Teresa Oyhamburu, quienes destacaron la importancia de esta iniciativa para el desarrollo productivo de la provincia.
Durante su intervención, el gobernador resaltó la trascendencia estratégica del programa y su potencial para cambiar la matriz productiva de la provincia. Así, explicó que "le asignamos a este programa mucha más efectividad que a las grandes obras de canales que estamos ejecutando. Aunque seguimos invirtiendo en infraestructura hídrica en todos los oasis productivos, desde el Sur hasta el Valle de Uco y el Este, este programa es el verdadero motor de cambio".
En este sentido, señaló: "Todos sabemos que enfrentamos una crisis hídrica y que la tendencia de menor disponibilidad de agua no se va a revertir. La clave está en cómo respondemos: o lo hacemos desde la queja y la desesperanza, o lo hacemos con una mirada propositiva y planificada", a lo que sumó que "este programa es esa mirada propositiva: ordenada, medible, concreta y con impacto directo en la producción".
Además manifestó que "si queremos administrar mejor el agua, no alcanza con apelar a la conciencia individual: debemos hacerlo de manera sistemática, con caudalímetros, con mediciones, con eficiencia real". De esta manera, explicó que "para eso necesitamos que el sector privado pueda acceder a recursos financieros. Por eso estas líneas de crédito son tan importantes: sin límite de proyectos, con tasas súper subsidiadas y con un año de gracia".
Cornejo subrayó que "si logramos que este modelo funcione en una parcela, en una finca y en toda una zona, vamos a lograr que Mendoza tenga toda su producción agrícola tecnificada intrafinca, produciendo más y mejor, aún con menos agua".
Así, antes de finalizar, aseguró que "esta es la apuesta más importante de mi gestión: subsidiar de manera inteligente para que nuestra agricultura sea más productiva y resiliente".
En modo canditato a diputado nacional para las elecciones del 26 de octubre, Luis Petri subrayó el valor estratégico de esta iniciativa para consolidar el modelo productivo mendocino. "Mendoza se hizo de un desierto un oasis, y hoy tenemos el desafío de sostener e incluso ampliar las superficies cultivadas. Para eso necesitamos tecnificar el riego", detalló, a lo que añadió que "este plan nos permite planificar, tener un masterplan y líneas de crédito específicas para que los productores puedan invertir en tecnología, acceder a asesoramiento y transformar sus sueños en realidad".
Así, señaló que "se trata de aumentar la eficiencia, de garantizar que el agua esté disponible todo el año, y de aprovecharla para generar más riqueza y más empleo. Este programa es la herramienta que nos permitirá seguir transformando Mendoza en un oasis productivo, aun frente a la adversidad climática".
El superintendente general de Irrigación, Sergio Marinelli, remarcó que esta iniciativa es la consecuencia de años de planificación.
Explicó que desde 2017 el organismo trabaja en un cambio cultural para planificar sobre la demanda y no solo sobre la oferta de agua. "Con buenas prácticas de riego podemos ahorrar entre el 10% y el 20% del recurso, lo que en años de bajo caudal puede ser la diferencia entre mantener o perder superficie cultivada", afirmó.
Asimismo, indicó que "este programa es mejor que cualquier obra: da acompañamiento permanente, asistencia técnica y líneas de crédito flexibles para que los pequeños productores puedan tecnificar su riego y sostener sus unidades productivas".
Ignacio Lamothe, del CFI, puso en valor a la provincia al explicar que la elección de comenzar en este territorio se debe a que "Mendoza fue la primera provincia en terminar su Plan Maestro Hídrico y tiene la institucionalidad más robusta del país en materia de administración del agua. Este convenio es un subproducto de ese plan y apunta a la eficiencia intrafinca, que es clave para que las inversiones en obras tengan sentido".
De esta manera, mencionó que "el CFI hace un esfuerzo extra en términos de tasa y de acompañamiento técnico porque sabemos que este programa tiene impacto económico y social. Queremos que funcione en Mendoza para luego replicarlo en otras provincias".
Oyhamburu, por su parte, aseguró que "este es un hito para la gestión del agua en Mendoza". Además, la directora de Programas del CFI destacó el trabajo interinstitucional al mencionar que "este programa parte de una evaluación parcelaria para proponer mejoras y monitorearlas. Lo iniciamos en Santa Rosa y San Carlos, donde los productores tienen un fuerte compromiso, y lo vamos a extender a toda la provincia. Es un proceso de mejora continua que combina asistencia técnica, financiamiento y participación de los productores. Estamos iniciando un camino difícil pero que llevará a Mendoza a un mejor lugar en la gestión de su recurso más valioso".
Fuente: Prensa de Gobierno