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¿Por qué es ilegal que te revisen el bolso en los comercios?

Un caso en Las Heras, Mendoza, disparó esta nota en la que podés enterarte qué hacer en caso de ser ví­ctima de un abuso dentro del establecimiento comercial.

Martes, 21 de Enero de 2025
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Entrás a un comercio, hacés tus compras y, justo antes de salir, alguien del personal te pide que abrás tu bolso. Aunque esta situación parezca común, pocos saben que es una práctica ilegal que viola derechos fundamentales protegidos por la Constitución y la Ley de Defensa del Consumidor.

Cuando la seguridad se convierte en abuso

Hace unos meses, Antonia, una vecina de Las Heras, llegó a mi oficina destrozada. Habí­a pasado el papelón de su vida en un supermercado de su barrio. Habí­a pagado todo, pero al cruzar la caja, un guardia le gritó delante de todos: "¡A ver tu bolso! ¡Mostrame lo que te robaste!".

Antonia, confundida y temerosa, accedió a abrir su cartera. Pero eso no fue suficiente. El guardia le exigió que se desvistiera en pleno pasillo para demostrar su inocencia. Rodeada de extraños, intentó contener las lágrimas mientras se quitaba prendas bajo la mirada de decenas de personas. Al final, no encontraron nada. ¡Nada! Pero el daño ya estaba hecho. Humillada y devastada, buscó ayuda legal, y juntos denunciamos al supermercado.

Este tipo de abusos vulnera la dignidad de las personas y subraya la necesidad de que los consumidores conozcan y ejerzan sus derechos.

Tus derechos: lo que los comercios no pueden hacer

  1. No pueden obligarte a abrir tu bolso: según el artí­culo 18 de la Constitución Nacional, nadie puede ser registrado sin una orden judicial.
  2. No pueden humillarte o acusarte sin pruebas: la Ley de Defensa del Consumidor (Ley 24.240), especí­ficamente en su artí­culo 8 bis, protege tu derecho a un trato digno y equitativo, prohibiendo expresamente las prácticas comerciales que impliquen situaciones vejatorias o humillantes hacia los consumidores.
  3. Solo la policí­a puede intervenir: si hay sospechas de hurto, el comercio debe llamar a la policí­a. Ningún empleado puede obligarte a mostrar tus pertenencias o someterte a revisiones públicas.

Normativa y fallos judiciales que te respaldan

En 2017, un fallo en Buenos Aires declaró que un comercio no puede obligar a un cliente a abrir su bolso sin una orden judicial. Este precedente refuerza que las prácticas arbitrarias de revisión son ilegales y contrarias a los derechos del consumidor. Además, en ese caso, el comercio fue obligado a indemnizar a la persona afectada, sentando un precedente claro de que estos abusos no quedan impunes.

La legislación también establece que las prácticas comerciales deben ser transparentes y respetar la dignidad de las personas. Los comercios que incumplen pueden enfrentarse a sanciones legales y administrativas.

¿Cómo actuar si te pasa?

Si te piden que abras tu bolso, tenés derecho a negarte. Seguí­ estos pasos:

  • Negate con firmeza: explicá que no tienen autoridad para obligarte.
  • Solicitá el libro de quejas: dejá constancia del incidente.
  • Registrá pruebas: si es posible, grabá la situación o pedí­ a testigos que te respalden.
  • Denunciá el abuso: acudí­ a la oficina de Defensa del Consumidor o buscá asesoramiento legal.

Soluciones para los comercios: prevenir, no perseguir

Los comercios tienen opciones para mejorar la seguridad sin vulnerar los derechos de los clientes:

  • Instalar cámaras de vigilancia: un monitoreo eficaz puede prevenir robos sin exponerte a abusos.
  • Capacitar al personal: formar a los empleados en protocolos respetuosos y legales.
  • Usar etiquetas de seguridad: sistemas que detectan productos no registrados sin invadir la privacidad de los clientes.
  • Usar casilleros o lockers para que los clientes puedan dejar sus pertenencias en forma gratuita o precintos. 

Conclusión: defender tus derechos es proteger tu dignidad

La revisión de bolsos en los comercios no solo es ilegal, sino también una práctica que refleja desconfianza y falta de respeto. Como consumidores, tenemos el poder y el derecho de exigir un trato justo y digno.

Si alguna vez te encontrás en una situación similar, recordá que la ley está de tu lado. No dejes que te humillen ni que tu privacidad sea violada. Denunciá, defendé tus derechos y ayuda a construir una sociedad más justa y respetuosa.