En el marco de estos procedimientos, se utilizan decibelímetros para medir en tiempo real los niveles de ruido emitidos por motos y vehículos. Aquellos que superan los valores permitidos por la normativa vigente son detectados de manera inmediata.

Además, a través del Programa Escape Preso, las motos que circulan con escape libre o que no cumplen con las condiciones reglamentarias son retenidas en el lugar. Los rodados secuestrados son trasladados al Depósito de Tránsito Municipal, donde permanecen a disposición del Juzgado de Faltas hasta que sus propietarios regularicen la situación correspondiente.

Desde el Municipio indicaron que estos controles responden a reclamos reiterados de vecinos y vecinas, y forman parte de una política sostenida para garantizar una convivencia urbana más ordenada, segura y respetuosa.

Las autoridades señalaron que los operativos continuarán realizándose de manera periódica en diferentes zonas del departamento, como parte de una estrategia integral de prevención y control.