Mendoza, de de
Mendoza, de de
Las autoridades del corredor bioceánico informaron que las largas filas de autos para cruzar a Chile llegaban hasta la zona de los cobertizos del lado chileno
Las autoridades delpaso Cristo Redentor habían comunicado que se armaría un operativo especial en la aduana argentina para el retorno de unos 45.000 turistas mendocinos que volverán a la provincia después de pasar las vacaciones y las fiestas de fin de año en Chile.
Una de las medidas fue la aplicación de un criterio selectivo de control de equipaje: se registra uno de cada 25 vehículos. La manera de elegir es aleatoria, lo que significa que cualquier auto puede ser optado para chequear los productos comprados en el vecino país.
La misma situación ocurre con el equipaje de las personas que viajan en colectivo, en su mayoría a realizar los tours de compras a Santiago. Se registran al azar minuciosamente solamente algunas valijas.
Para prevenir accidentes, se pusieron en marcha cinco controles policiales desde la salida de Mendoza: el primero en Luján de Cuyo, después en Potrerillos, Uspallata, Punta de Vacas y Las Cuevas.
El de Uspallata, en Los Árboles, coincide con los de Gendarmería nacional. Precisamente allí se ubica una de las playas de servicios que se instalaron para descomprimir el tránsito en la ruta 7 y evitar las extensas filas de autos para entrar a los Libertadores.
En ese lugar deben esperar en horarios pico para salir en tandas de unos 130 autos hacia el cruce internacional.
