Un diagnóstico rarísimo está sorprendiendo a médicos de todo el mundo: algunas personas desarrollan niveles de alcohol en sangre sin haber consumido. Por qué ocurre y cuáles son los signos de alerta.
Aunque suene a excusa o a mito, existe una condición médica en la que el cuerpo produce alcohol de manera interna, a partir de la fermentación de carbohidratos ingeridos en la dieta. Se llama síndrome de fermentación intestinal o "síndrome de autocervecería" (Auto-Brewery Syndrome) y fue descrito por primera vez en la década de 1970.
La Asociación Médica Americana describe este cuadro como "una fermentación endógena capaz de generar niveles clínicamente significativos de alcohol en sangre".
Los casos confirmados son muy pocos y se cree que está infradiagnosticado, ya que sus síntomas suelen confundirse con consumo oculto de alcohol, trastornos neurológicos o problemas psiquiátricos.
En 2019, un hombre de 40 años de Bélgica fue condenado por manejar alcoholizado. Volvió a dar positivo años después, pero él aseguraba no haber bebido.
Los médicos señalan que puede desarrollarse después de:
El abordaje incluye normalmente:
Los especialistas recomiendan considerarlo cuando un paciente:
Eso sí: antes, se deben descartar consumo oculto y trastornos psiquiátricos.